Planear y organizar

Comienza por establecer metas claras para mejorar la calidad del programa educativo, como por ejemplo aumentar la participación de las familias en las actividades escolares, invitar a un mayor número de articuladores culturales para potenciar las experiencias de los niños; o y fortalecer el trabajo en equipo entre los maestros. Una vez tengas claras las metas del periodo, haz una lista de actividades necesarias para lograr cada meta (por ejemplo, quizás para aumentar la participación de las familias puedes organizar una noche de lectura, planear una salida pedagógica o invitarlos a crear una huerta para el centro educativo; y organizar diálogos pedagógicos en este tipo de actividades). Al finalizar tu lista de actividades, priorízalas y empieza a desarrollarlas de acuerdo con esa priorización, y en compañía de tu equipo, para lograr tus metas. 

Es importante que planees tu tiempo alrededor de las metas que quieres lograr. Para esto, puedes utilizar una agenda para programar reuniones regulares con el equipo de trabajo y familias y de esta forma mantenerlos informados o co-crear junto con ellos diferentes estrategias que fortalezcan a tu institución. También puedes valerte de herramientas como calendarios o alarmas en tu celular o tu computador para recordar fechas importantes como por ejemplo eventos o capacitaciones. Por último, puedes usar aplicaciones de gestión del tiempo que se encuentran disponibles de manera gratuita en internet, como por ejemplo Wrike, Trello o Britix24, entre otras; que te ayudan a planear tu agenda, recordar tareas pendientes y asegurar que cumples con plazos de tus proyectos. 

Es importante que establezcas horarios para tus reuniones de equipo, tiempo dedicado a hacer planeaciones, otro para acompañar a los educadores; tanto para observación como para darles retroalimentación y ayudaros a mejorar su gestión; tiempo para jornadas de bienestar, para pausas activas, y para la revisión de informes y documentaciones. 

Un ambiente de trabajo libre de distracciones, tanto para ti como para el resto de ti equipo; promueve la eficiencia y la productividad. Asegura que los maestros tengan espacios dedicados para la planificación y que los materiales educativos estén organizados y fácilmente accesibles, tanto para ellos como para los niños y las niñas. También puede fomentar una cultura de trabajo eficiente, alentando a los maestros a apagar notificaciones innecesarias durante el tiempo que están con los niños y las niñas durante su tiempo de trabajo libre de distracciones. 

Asegúrate de empoderar a todos los miembros de tu equipo de manera que las responsabilidades sean compartidas y no recaigan todas sobre ti. Delega responsabilidades entre el personal y garantiza que cada maestro tenga un rol claro y específico en el jardín. Por ejemplo, puedes asignar a un maestro la responsabilidad de coordinar experiencias culturales, a otro la gestión de los recursos o materiales; y a otro el liderar la ambientación de los espacios. De esta manera, podrás enfocarte en aspectos estratégicos y de desarrollo del jardín.