Ideas para ayudar al niño a volver a la calma

Cuando un niño esté muy alterado, puedes utilizar la técnica del “corazón calmante”. Coloca suavemente su mano en su pecho, sobre su corazón, para que pueda sentir los latidos. Esto ayudará a que se concentre en su respiración y se calme. Ofrece un abrazo si es apropiado y respetuoso para el niño, o simplemente acompáñalo y hazle saber que estás ahí para él. Invita a todos los demás miembros del grupo a respirar tranquilamente junto con el niño. Mantén una actitud tranquila y serena en el aula, mostrando tu disposición para apoyar la situación.