Importancia de los derechos de la niñez

Importancia de los derechos de la niñez

[bws_pdfprint display='print']

Cuando hablamos de la niñez, y específicamente de la primera infancia, nos estamos refiriendo quizás a una de las etapas del desarrollo mas determinantes para la vida de un ser humano, porque dentro de esta etapa se consolidan las bases cognitivas, emocionales, sociales y motoras que hacen parte del desarrollo de los seres humanos.  

Es importante que, como educador, actúes como garante de los derechos de los niños porque: 

 

 

 

 

 

Los derechos de los niños promueven su desarrollo integral, asegurando así que sus necesidades en salud, educación, y nutrición sean reconocidas como una prioridad; y les permitan un crecimiento sano. 

Los niños y las niñas son sujetos de derechos. Estos fueron reconocidos por la Convención de las Naciones Unidas de los Derechos del Niño, establecida en 1989, que es el punto de referencia para la promoción y establecimiento de garantía de esos derechos, que son los siguientes: 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

El reconocimiento de estos derechos también nos da una visión de aquellas prioridades para los niños que debemos garantizar, como por ejemplo su salud, nutrición, jugar, aprender y explorar; y de la misma forma nos dan un marco de aquellas cosas a las que no deben ser sometidos bajo ninguna circunstancia, como la explotación laboral y el maltrato psicológico y físico.

 

 

 

 

 

Estos derechos cambian la imagen que tenemos del niño, y en esa medida nos permiten establecer con ellos relaciones como socios, en igualdad de condiciones y permitiéndoles así, se protagonistas de sus procesos de aprendizaje.  

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Reconocer estos derechos nos permite concebir a todos los niños y niñas de la misma forma, sin importar sus características o preferencias personales; asegurando de esta forma un enfoque incluyente en nuestras relaciones con ellos; y en los espacios y experiencias que promovemos para ellos. 

Conoce más artículos como este en nuestra sección de Contenidos gratuitos.

Artículos relacionados

Respuestas

  1. Como adultos y acompañantes de los niños y niñas nuestro deber siempre sera el reconocer que ellos son seres únicos que por lo cual, tienen su propio de ritmo de aprendizaje que potencian através de diferentes espacios, herramientas y materiales que son dadas por nosotros pero, que ellos son los que construyen así, su propio conocimiento.

  2. Reconocer a los niños y niñas como sujetos activos, únicos y capaces nos permite ampliar nuestro horizonte; sensibilizarnos ante sus emociones y comprender la forma en cómo ellos perciben el mundo y actúan en él. Establecer relaciones mucho más afectuosas y respetuosas con su ser.

  3. Siempre será importante el protagonismo de los niños en su formación y aprendizaje; es importante sensibilizar a las familias en el sentido de que la casa es el primer espacio educativo y no solo le corresponde a la institución educativa brindar estos espacios y momentos.

  4. Es importante actualizar la información que brinda este documento, dado que el desarrollo no se puede definir por «etapas» porque el desarrollo de las niñas y los niños no es lineal, ni identico en todas y todos. Por eso se habla de momentos del ciclo de vida, tal y como se presenta en los linemaiento técnicos del Ministerio de educación Nacional y de la CIPI:

    “La primera infancia es un momento del ciclo de vida en el que suceden un sinnúmero de transformaciones biológicas y psicológicas que están en estrecha relación con los aspectos ancestrales, sociales, culturales y con las condiciones de los contextos en los que viven los sujetos. Estos cambios no ocurren de manera lineal, secuencial, acumulativa, homogénea, es decir, no suceden de la misma manera ni al mismo tiempo para todas las niñas y los niños, lo cual revela que son seres diversos, con ritmos y estilos de desarrollo propios” (Comisión Intersectorial de Primera Infancia, 2013).

  5. La garantía de derechos en niños, niñas y adolescentes es un deber de todos y todas. Desde la primera infancia podemos marcar el territorio de protección y seguridad por medio de herramientas que establezcan el desarrollo integral de nuestros niños.

  6. Los niños son sujeto de derechos y por ende nosotros los adultos debemos abogar, para que se cumplan, además de propiciar espacios donde se sensibilicen a las familias de los mismos, así como generar herramientas que le permita a las familias empoderarse del rol de cuidadores.