Dispón de un espacio al aire libre, una piscina inflable, bañera o un recipiente amplio como un platón o balde donde quepa el niño. Luego invítalo a irse de paseo, para eso harán maletas y empacarán: traje de baño, bloqueador solar, toalla para el cuerpo, pelotas, frutas, fiambre y otros objetos que el niño desee llevar al paseo. Esto se hace con el fin de poder salir de la rutina y afianzar los vínculos afectivos entre padres e hijos, además de fortalecer la motricidad gruesa a través de pequeños juegos con el agua donde se generarán movimientos con el cuerpo.
En este espacio, exploramos la importancia del juego y cómo es una poderosa herramienta para crear lazos afectivos sólidos con tu hijo. ¿Estás listo para…