Construyendo proyectos de investigación en aulas de primera infancia

En el mundo de la primera infancia, cada día es una oportunidad para descubrir y aprender cosas nuevas. Como educadores, tenemos la responsabilidad de aprovechar esta etapa crucial del desarrollo para fomentar la construcción del conocimiento y la investigación en los niños y las niñas de manera autónoma y colectiva. Los proyectos de investigación son una forma de lograrlo, ya que los involucran en experiencias prácticas que les permiten explorar temas de su interés. En este artículo, descubrirás cómo construir proyectos de investigación con niños y niñas menores de 5 años y los beneficios que brindan en su proceso de aprendizaje.

1. La exploración:

Esta es la forma natural en la que los niños y las niñas reconocen su entorno. Aprovechemos esta curiosidad innata para identificar los temas que despierten su interés, desde una observación participante que no busque guiar, sino acompañar, escuchar y proporcionar herramientas para ayudarlos a dar respuesta a sus interrogantes. En este punto, es importante que el adulto genere preguntas que le permitan al niño y la niña movilizar su pensamiento, ir más allá de lo evidente y construir sus propias hipótesis.

2. Analiza, reflexiona y planea:

Partiendo de los intereses que identifiques en los niños y las niñas, y que puedas retomar desde sus dibujos, grafías, voces, fotografías y toda la documentación que hayas recogido; es necesario tener un espacio de reflexión en el que puedas analizar ¿De dónde surgió el interés del niño? ¿Qué es exactamente lo que le interesa? ¿Qué preguntas se ha realizado? ¿Ha construido alguna hipótesis?

Al resolver estas preguntas, podrás establecer el rumbo de la investigación y proponer experiencias que los motiven a seguir explorando y cuestionándose. Recuerda establecer espacios de diálogo con los niños, en los que puedan analizar lo que están investigando, lo que van descubriendo, escuchar sus preguntas e ideas; para así seguir enriqueciendo la investigación.

3.Acceso a recursos:

Proporcionar acceso a materiales, medios y herramientas, es esencial para enriquecer la experiencia de investigación de los niños y las niñas. Crea un ambiente de aprendizaje enriquecido con libros, revistas, material natural, reciclado, industrial y todos los elementos que conecten con el interés. Por ejemplo, si los niños y las niñas están interesados en las tortugas, puedes disponer material que tenga una textura similar a su caparazón, como corteza de árbol, cubetas de huevo o cartón.

Fomenta la colaboración con las familias y la comunidad para obtener recursos adicionales. También puedes invitar personas que conozcan sobre el tema y que enriquezcan el conocimiento de los niños y las niñas.

4. El rol del adulto:

Los niños y las niñas son capaces de co-construir conocimiento a partir de la exploración libre y autónoma; donde el adulto solo acompaña el proceso de aprendizaje, con una mínima intervención.

Cuando el maestro reconoce en qué momento puede generar preguntas que apoyen lo que el niño o niña está haciendo, está ayudándolo a movilizar su pensamiento, complejizar sus ideas y aprender de forma autónoma.

5. Los objetivos de aprendizaje o hitos en el desarrollo:

Cuando el maestro conoce los objetivos de aprendizaje que el niño y la niña deben lograr, de acuerdo a su edad; sus estrategias estarán enfocadas en ayudarlo a alcanzar su máximo potencial. Por ello, es importante que, al desarrollar un proyecto de investigación en el aula, las experiencias de exploración que se propongan tengan una intención clara, respecto a cómo fortalecer sus habilidades y capacidades.

6. Exalta la voz del niño:

Cuando un proyecto de investigación se desarrolla a partir de los intereses, preguntas e ideas de los niños y las niñas, es necesario hacer esto evidente en el aula. Para ello, el maestro puede disponer de forma periódica, fotos, dibujos, construcciones, frases y todo aquello que refleje cómo los niños y las niñas están aprendiendo. Esto no solo hará visible su proceso de aprendizaje, sino que les permitirá retomar experiencias o compartir con otros lo que están realizando.

Los proyectos de investigación en las aulas de primera infancia brindan a los niños y las niñas la oportunidad de potenciar su curiosidad y exploración del mundo. Alentar y apoyar su espíritu investigador, no solo les brinda herramientas valiosas para el aprendizaje a lo largo de su vida, sino que también les enseña habilidades de pensamiento crítico, resolución de problemas y trabajo en equipo. Como educadores, tenemos el privilegio de acompañar a los niños y las niñas en su descubrimiento, inspirándolos a buscar respuestas y a desatar su potencial.

¡Acompaña a los niños y las niñas a construir su propio proyecto de investigación!