Responder a: Nuestro ser

  • Johana Murillo Reay

    Miembro
    13 de junio de 2024 a 18:40

    Durante mi experiencia, he podido identificar diferentes tipos de violencia que afectan notablemente a los niños y niñas, impidiéndoles un adecuado desarrollo y condicionándolos a repetir conductas dañinas. Por esta razón, es crucial brindar estrategias a los agentes educativos para reconocer y hacer seguimiento de cada situación con el apoyo psicosocial necesario. Esto incluye la observación atenta y la intervención adecuada en colaboración con profesionales de la salud mental y otros expertos.

    Además, considero vital sensibilizar a los padres de familia sobre el manejo de las emociones y las pautas de crianza, promoviendo acciones de buen trato. Los padres deben estar equipados con herramientas y conocimientos para manejar situaciones de estrés y conflicto sin recurrir a la violencia. Programas de educación parental, talleres y recursos accesibles pueden ayudar a crear un entorno seguro y amoroso para los niños, fomentando su desarrollo integral y bienestar emocional.

    Promover una cultura de buen trato y respeto dentro de las familias no solo beneficia a los niños, sino que también fortalece las relaciones familiares y contribuye a una sociedad más saludable y armoniosa. Es esencial trabajar de manera conjunta entre educadores, padres y profesionales para asegurar un entorno protector y nutritivo para todos los niños y niñas.