De los 3 a los 4 años: esta edad los niños empiezan a contar objetos usando a identificar algunas propiedades de los objetos como largo, corto, rojo, azul o borroso. También empiezan a utilizar las habilidades de resolución de problemas durante las actividades, como planificar y construir una estructura de bloques, hornear galletas o aprender sobre sus cuerpos y otros seres vivos de su entorno, incluidas las mascotas y las plantas. Para fortalecer esas habilidades puedes pedirle ayuda con la organización de la mesa para la cena, indicarle que ponga un plato para cada miembro de la familia y que cuente y se asegure que haya suficiente para todos. También puedes hablar con ellos durante las rutinas diarias usando palabras descriptivas como “el árbol alto”, “el perro peludo”, etc.; o puedes disponer de juegos que ellos puedan apilar, montar y desmontar como rompecabezas o bloques de lógicos.