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Estrategias para fortalecer los procesos de autonomía en los niños
La construcción de autonomía es prioritaria en el desarrollo de los niños, porque les brinda seguridad, confianza y fortalece su autopercepción. Además, a medida que ganan independencia, cuentan con más herramientas para descubrir el mundo a su alrededor y relacionarse satisfactoriamente con los demás. Fortalecer esos procesos de autonomía es un proceso en donde los padres y cuidadores deben debe trabajar en conjunto como socios de los niños; permitiéndoles avanzar a su propio ritmo. Para facilitar estos procesos, te compartimos algunos consejos:
Permite que coma solo: Desde que el niño comienza a consumir alimentos sólidos puedes aprovechar los momentos de alimentación para promover su independencia. Permite que explore los alimentos y que trate de llevarlos a su boca bien sea con los cubiertos o con sus manos. No te preocupes por el reguero que se pueda hacer, si se ensucia o si no sabe usar adecuadamente los cubiertos desde el principio. Poco a poco irá adquiriendo la coordinación viso manual y las habilidades de motricidad fina que requiere para lograrlo; y es precisamente ese proceso que experimenta, hasta que o logra, el que le ayuda a fortalecer su autonomía.
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Invítalo a realizar cosas por sí mismo: en medio del afán por quererlos ayudar, los adultos pecamos haciendo las cosas por los niños. Cosas como cargar su maleta para el centro educativo, organizar sus juguetes, recoger sus platos luego de comer y llevarlos a la cocina, lavarse las manos o incluso bañarse son actividades que el niño puede ir realizando desde pequeño, y que le permitirán fortalecer su autonomía desde muy pequeño. Acompáñalo guiando esta clase de acciones pero permite que sea él quien las realice.
Aprovecha las dinámicas alrededor de las prendas de vestir: las prendas de vestir también presentan muchas oportunidades para fortalecer la autonomía de los niños. Dialoga con los padres para que le permitan al niño escoger las prendas de vestir que usará a diario, lo que también le servirá en la construcción de su identidad. Para evitar que se abrume, recomiéndales que le den a escoger siempre entre dos opciones: ¿qué pantalón usarás hoy, el verde, o el naranja? En el centro educativo también puedes acompañarlo en este sentido. Por ejemplo, al momento de ir al parque, si el clima está frío, puedes dialogar con él como “Mira, está haciendo frío, ¿prefieres ponerte este saco, o esta chaqueta?
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Dale opciones: si tu aula está distribuida en rincones de interés, pregunta al niño durante la asamblea de inicio del día en qué rincón quiere estar y permite que juegue y explore allí. Si es el momento de ir al parque puedes preguntar al grupo si prefieren ir saltando, caminando, o corriendo, o quizá quieran ir haciendo movimientos de vuelo con sus alas, porque han estado jugando a ser pájaros en la mañana. Durante los momentos de alimentación puedes preguntar si quiere comer primero la carne o las verduras; o en el momento de sueño puedes permitir que escoja en qué lugar del aula desea ubicar su colchoneta.
Reconoce y da importancia a sus intereses: una de las mejores formas de ayudar al niño a fortalecer su autonomía es brindándole seguridad en sí mismo; y una manera muy sencilla de lograrlo es reconociendo y validando sus intereses, dándole a entender que su voz, su pensamiento y sus hipótesis son importantes. Para esto, observa y escucha muy atentamente. ¿De qué habla?, ¿qué observa con detenimiento?, ¿qué preguntas te hace? Cuando hayas identificado ese interés, promueve experiencias alrededor del mismo; y permite que sea él quien protagoniza esas experiencias. Por ejemplo, si los niños están interesados en la manzana, trae manzanas reales al aula, córtalas, deja que las exploren. Invítalos a dibujarlas, pero deja que sean ellos quienes observen su forma y su color, y las dibujen como ellos las perciben. Invítalos a probarlas, hazles preguntas: ¿a qué sabe?, ¿de dónde vienen?, anota sus respuestas y dialoga después con ellos sobre esas hipótesis; y ayúdalos a comprobarlas. Por ejemplo, si una hipótesis es, “Las manzanas vienen de la tienda” vayan a la tienda y hablen con el tendero; y permite que le pregunten de dónde vienen las manzanas.
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