La música, las obras de teatro, los museos, las puestas en escena y las pinturas, entre otras; traen consigo particularidades culturales, lenguas y formas de expresión que te llevarán a apreciar otras perspectivas y a transformar la forma en la que vez el mundo. 

Cuando tienes la oportunidad de visitar lugares sorprendentes, escuchar anécdotas de otras culturas, practicar algún deporte extremo o simplemente hacer algo que no haces de manera usual, estas brindándole a tu mente un respiro y llenándola de nuevos saberes.

A veces, las ideas pueden llegar cuando menos te lo esperas: mientras caminas, mientras preparas la cena o mientras vas en el transporte público; por ello, una buena idea es tener a la mano una libreta de apuntes, así podrás tomar nota de eso que surge de repente en tu mente; y no importa que esta no sea la idea final, esta libreta puede ser tu gran aliada cuando necesites inspiración. 

Una buena estrategia para abrirte a nuevas ideas y conocimientos es estar en constante aprendizaje; así que anímate a participar de algún taller o curso que fortalezca algún aspecto personal o profesional. Recuerda que ahora encuentras muchas opciones que se adaptan a tu ritmo de vida, como cursos o charlas virtuales de las puedes participar en tus tiempos libres. 

Una buena forma de activar tu creatividad es proponer lo que está pasando por tu mente; pues, aunque esta no sea la idea que se está buscando o que los demás esperan, siempre puede enriquecerse en conjunto.